La mayoría de las monedas españolas complementarias a la peseta han pasado desgraciadamente desapercibidas. Pero nuestro país cuenta con una gran historia numismática en este aspecto que está aún por estudiar.
A lo largo de la historia del dinero de España se encuentran numerosas monedas comerciales o empresariales emitidas por todo tipo de instituciones, fábricas, cooperativas, establecimientos, empresas privadas y aun de grandes empresas estatales como Metro, Telefónica etc. Estas entidades emitieron monedas y billetes que pueden cambiar nuestra visión sobre lo que fue la moneda complementaria y lo que es, o mejor debería ser, el dinero en general hoy en día.
Quizás por motivos políticos o socioeconómicos nunca se ha hablado mucho de este tipo de monedas complementarias. Al final de la Guerra Civil simplemente se impuso la peseta nacional a la peseta republicana y pasaron a un segundo lugar numerosas monedas y billetes municipales, entre los cuales se pueden encontrar bellos ejemplos de lo que hoy llamaríamos monedas “complementarias” de la “nueva” economía. No se han estudiado las monedas oxidables españolas, las funciones de los billetes municipales como medio social de fomento de la economía local (https://panoramanumismatico.com/articulos/moneda-social-espanola/), ni las monedas solidarias, como son los billetes de auxilio social a refugiados de la guerra civil; ni la moneda española complementaria, como las coronas de la Ciudad de los Muchachos (https://panoramanumismatico.com/articulos/la-ciudad-de-los-muchachos-y-sus-billetes/), ni lo que hemos decido hoy llamar moneda, o mejor dicho, dinero empresarial.
Sobre exste último punto vamos a tratar aquí con algunos ejemplos, como los cartones de peseta de la compañía Minero-Metalúrgica “Los Guindos” de la Carolina de Jaén, o billetes en pesetas del metro de Madrid o de Barcelona, de Río Tinto, de bares y cafeterías, de la industria textil, etc.
Para empezar hay que decir que consideramos moneda comercial o empresarial toda aquella que ha sido utilizada por empresas para uso interno de los empleados y los clientes, aunque tenemos constancia de que en algunos casos los comercios cercanos a ellas las aceptaban gustosamente porque sabían que podrían ser cambiadas fácilmente por productos de las mismas.
Nuestro primer ejemplo es el de la compañía Minero-Metalúrgica “Los Guindos” de la Carolina (Jaén). Según la edición digital de la Información de Andalucía ”El origen de la compañía se remonta al 3 de marzo de 1899, en que se constituye la ’Sociedad Minera El Guindo’, arrendando una concesión de explotación firmada por Isabel II en 1866. El capital inicial fue de mil acciones de 500 pesetas y se llegó a ampliar hasta 20 millones de pesetas en 1907. En 1920 se sitúa como una de las mejores compañías mineras de España y se disuelve para constituir la Compañía Minero Metalúrgica ’Los Guindos’, con un capital de 50 millones de pesetas dividido en acciones de 500 pesetas cada una. (…) Las explotaciones contaban con modernas instalaciones de extracción, desagüe, lavaderos, así como un cable aéreo desde las minas hasta el ferrocarril de Linares a La Carolina. El agotamiento de los filones y la caída del precio del plomo forzaron su cierre en 1984.” (http://andaluciainformacion.es/andalucia/2399/la-carolina-una-ciudad-ligada-al-desarrollo-minero/).
Por la falta de enumeración, catalogación, incluso documentación como las fechas impresas de muchas de las propias emisiones de este tipo de moneda “comercial” desgraciadamente no sabemos exactamente de qué fechas son los cartones por ejemplo que mostramos de 0,50, una y dos pesetas de “La Carolina”. Suponemos que se trata de emisiones de los años 20-30 o ya de la guerra civil (1936-1939) o aun más tarde, de la posguerra.
Estos otros billetes que vemos están impresos por Standard Eléctrica S.A. de Madrid durante la guerra civil para circulación interna. El edificio que se reproduce en el reverso es el de la sede de Standard en la Calle Ramírez de Prado de Madrid. Vienen en una fotografía del Archivo Histórico Fotográfico de Alcatel España en Madrid, aunque los que reproducimos aquí pertenecen a nuestra propia colección. Nos encantaría saber si hay más valores, ya que de esta serie de octubre de 1937, que parece ser la primera, solamente tenemos el de 0,50 peseta, pero de la serie de diciembre tenemos dos valores; 1 peseta y 0,50 céntimos. ¿Nos pueden decir algo acerca de esto? ¿Hay más valores?
A pesar de la falta de estudios sobre el tema, sobre todo en Andalucía y Valencia se pueden encontrar algunos ejemplos más de este tipo de moneda comercial. Especialmente en Valencia hemos encontrado numerosos ejemplares no catalogados, como los del Ateneo Popular Valenciano de 1937, la Casa Balanza o la Granja de Levante de mayo de 1937.
De Cataluña sí se puede encontrar algún estudio sobre las cooperativas y los billetes complementarios españoles. Hay varios catálogos sobre el tema empezando por los muy conocidos de Turró y también el de Antoni López Lluch (1983), Les Monedes de Les Cooperatives Catalanes. Departamento de Cultura de la Generalitat de Catalunya, otro magnifico catálogo que se editó en tres volúmenes.
De esta región proviene este otro bello ejemplo poco conocido de lo que llamamos la moneda comercial. Fue emitido en Barcelona por La Maquinista Terrestre y Marítima (MTM) y está fechado en Febrero de 1937.
Es sabido que durante las colectivizaciones (1937 a 1938) muchas empresas importantes emitían moneda propia, tanto en metal como en cartón o papel, pues se encuentran muchas aun hoy en día. Eran monedas para uso principalmente “interno” en los comedores, economatos y otros servicios. No tenemos constancia de las emisiones que se hicieron ni de los valores faciales de que constaban. En el caso de la MTM hemos encontrado ejemplares de peseta y cartones sellados con valores inferiores, de 0,10-0,15 y 0,75 pesetas, como se puede apreciar en las fotos y por lo que suponemos que deben haber existido del billete de 1 pesetas cambio en moneda fraccionaria de por lo menos 0,10 y 0,15 y 0,75 pesetas.
Nos hemos dirigido en Barcelona a representantes de la MTM, que siguen hoy en activo y tienen una curiosa presencia en Internet con su web y su Facebook de trabajadores y socios actuales y antiguos. A través de su representante de Facebook se nos asegura que en el caso de la MTM o en el de la Hispano Suiza, estas “monedas” eran bienvenidas en los comercios de alrededor las fábricas, por la seguridad que daban al poderse canjear sin problemas en las mismas empresas.
Durante la guerra civil española estos billetes autónomos de empresas como la MTM fueron un auténtico símbolo de resistencia republicana. El gobierno de Catalunya en el período 1934-1939 comienza con la elección de Lluís Companys como presidente en una votación extraordinaria del Parlamento el 1 de enero de 1934. La Maquinista Terrestre y Marítima durante esta época fue colectivizada por la Generalitat, mientras los dirigentes y propietarios capitalistas huían a la zona franquista. Constituyeron una dirección y un consejo de empresa en San Sebastián en mayo de 1937. El mismo año, la fábrica pasó a poder de la subsecretaría de armamento, y fue destinada a la fabricación de material bélico, con el nombre de ’Fábrica 0’. Nunca se hizo oficial la postura de la fábrica pero la clase obrera se posicionó y estos billetes son de esta época y dejan un mudo testimonio de lo ocurrido. Probablemente se utilizaban para uso interno de los empleados. Destaca el sello en seco que llevan y que hace complicada su falsificación. También es curioso ver la propaganda, el auto bombo que se dio con la foto utilizada para el billete de la locomotora y el nombre comercial. Como dato histórico de la acción social del momento hay que anotar que hubo un robo de diez tanques el 5 de marzo de 1937 por parte del Partido Socialista Unificado de Cataluña (PSUC), atribuido después al Comité Central de Milicias Antifascistas de Cataluña.
Las grandes empresas siempre han jugado un papel importante dentro de la economía social de la guerra y aun en la posguerra. Se dice que La Maquinista Terrestre y Marítima colaboro en secreto con la resistencia. En el mes de abril del año 1947 la organización clandestina del Partido Socialista Unificado de Cataluña (PSUC) en Cataluña sufrió uno de sus golpes más duros con la desarticulación de las agrupaciones guerrilleras que operaban en la ciudad en lo que se conoce como la ’caída de los 80’ y por las relaciones que los grupos guerrilleros mantenían con la organización política a través de los comités de sector se produjo la detención del responsable de La Maquinista Terrestre y Marítima.
Estos billetes son enigmáticos ya que creemos que sirvieron a un tiempo como “moneda social de régimen interno de la fábrica”, así como de propaganda para sus productos. Nosotros no hemos podido encontrar información de su uso y funciones sociales de intercambio de bienes y servicios entre los trabajadores de dicha fábrica. Es como si estos billetes no hubiesen existido nunca, o simplemente sus propósitos se hubieran ido perdiendo o acallando. Los testigos han fallecido o no han dejado nunca constancia de su uso social. No hay prácticamente información de estas monedas. Pero son precisamente estos billetes los que podrían contribuir hoy a un claro mensaje, no ya propagandístico de una fábrica, sino de un “dinero social español” que demuestra que la economía social solidaria y local de uso interno de los trabajadores, ya funcionó entonces y no es ninguna novedad. (En la imagen moneda emitida por el Sindicato textil de Callosa de Segura de la Unión de Hermanos del Proletariado).
Muchos de estos billetes de cooperativas como los de “La Maquinista Terrestre y Marítima” dan testimonio de esta “economía social” histórica española. Entendemos que el rescate del baúl de los recuerdos de la moneda social española es laborioso y complicado ya que la mayoría de estos billetes se han destruido o se encuentran en manos particulares. Además no interesa hablar mucho de ello ya que con el ascenso del fascismo en Europa se prohibió la “socialización del dinero”.
Evidentemente la moneda comercial ha existido, como mostramos aquí, pero ¿qué uso se le daba? ¿Cómo funcionaba? ¿Se la puede considerar realmente moneda complementaria de economías solidarias? (En la imagen un ejemplar muy raro de la sociedad de camareros Hoteleros y Anexos de Torrevieja.)
Sirven pues de mucho estos billetes comerciales tanto para recordar verdades históricas así como el uso de monedas como instrumentos de dirección de la socio-economía de hoy y de la de entonces. Son monedas y billetes desgraciadamente poco considerados como pequeñas muestras de economía social con implicaciones más profundas. Desde luego que la vinculación de empresas como la Maquinista Terrestre y Marítima con la política, muestran la fuerza que tiene la clase obrera en las luchas sindicales por un mundo laboral más solidario. Hay muchos más ejemplos disponibles en nuestra web del caso textil, la alimentación, billetes de marcas de café, bodegas, bebidas alcohólicas como la cerveza, etc. Vean más “Moneda comercial” en la web www.BilletesMunicipales.com.
Wilko von Prittwitz
Hola,
Cuando redacté este artículo en su momento adjunté numerosas fotografías que se mencionan en el texto. Sé que por motivos de la migración de la web, estas fotos se ha perdido, pero las pueden ver aún hoy desde aquí:
https://www.billetesmunicipales.com/monedacomercial.html
salu2
Dr. Prittwitz