Homenaje al San Bernardo

Homenaje al San Bernardo

Homenaje al San Bernardo 500 332 admin

Nueva moneda suiza conmemorativa en oro dedicada al mítico perro san Bernardo Barry. Con un facial de 50 francos, está acuñada en oro de 900 milésimas, en calidad proof y emisión limitada.

Antes de la Patrulla Canina, mucho antes incluso que Lassie o Rintintín, hubo otro perro muy famoso y que además fue real. Se trata de Barry, un san Bernardo que vivió en el hospicio de peregrinos del Gran San Bernardo entre 1800 y 1812. Se dice que salvó la vida de más de cuarenta personas y su fama se extendió por toda Europa gracias a los soldados de Napoleón que cruzaron los Alpes y conocieron su historia.

El perro san Bernardo, con su barrilito al cuello, se ha convertido en uno de los iconos de Suiza. Su presencia en el monasterio de los monjes trapenses, fundado en el siglo XI para ayudar a peregrinos y viajeros que atravesaban las montañas por el paso del Gran San Bernardo, está atestiguada desde el siglo XVII. Hoy en día Barry, el más famoso de esta raza de mastines, tiene su propio museo y una fundación destinada a perpetuar su raza.

El más reciente de los homenajes le ha llegado en forma de moneda de oro, acuñada por la ceca de Suiza y puesta a la venta el pasado 14 de septiembre. Se trata de una pieza de 50 francos suizos de valor facial, acuñada en metal precioso de 900 milésimas de pureza. El volumen de fabricación será de 4.000 unidades, todas ellas en calidad proof, con un peso de 11,29 gramos y un módulo de 25 milímetros.

Al igual que en otras emisiones conmemorativas de Suiza, en el anverso aparece la cruz rodeada por el nombre del país, el valor facial y el año de acuñación 2017. La otra cara es obra de la artista e ilustradora Maya Delaquis, especialista en dibujar animales, como queda demostrado en la imagen del San Bernardo de esta moneda. En primer plano, con su icónico barrilito y acompañado del paisaje alpino, sólo le acompañan el nombre Barry y la firma de la diseñadora.

Aunque las acuñaciones conmemorativas suizas no son especialmente abundantes, aún son más escasas las que realizan en oro. Desde el año 2001 sólo se ha efectuado un lanzamiento por año, a excepción de 2004 en que se acuñaron dos series áureas, y el volumen máximo de emisión no suele rebasar los 5.000 ejemplares, lo que las convierte en series muy cotizadas.

Información e imágenes: Swiss Mint.

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