Este es el título de la exposición temporal que puede visitarse actualmente en el Museo Numismático de Múnich y que aporta una nueva luz sobre el papel que pudieron haber jugado las monedas en la difusión del arte románico.
Hasta el mes de abril de 2019 estará abierta esta atractiva exposición temporal de la Staatliche Münzensammlung muniquesa que plantea una interesante pregunta: ¿qué papel jugaron las monedas en la rápida difusión del románico? Como sabemos, este estilo artístico se extendió por Europa entre los siglos XI y XIII en la pintura, la arquitectura y la escultura, pero también en las monedas. Centrándose en las acuñaciones del sur de Alemania y de la actual República Checa, la muestra nos permite apreciar el cambio de estilo en las monedas.
Gracias a estas pequeñas piezas de plata, muchas de ellas del tipo que conocemos como bracteadas, las gentes de la Edad Media tuvieron en sus manos, aunque fuera en escaso número, escenas con historias bíblicas o de la mitología clásica, representaciones del cielo o de los señores, las arquitecturas de las iglesias y de las ciudades…
Imagen: Pfennig de la ceca episcopal de Ratisbona con la representación de Hércules luchando contra el león de Nemea, c. 1130, procedente del tesoro de Obing. Foto: Nicolai Kästner
Los paralelos estilísticos de las monedas con las formas del románico son obvios, pero lo que no se ha analizado hasta ahora es el papel que pudieron haber jugado estas en la difusión del estilo, teniendo en cuenta que, como es sabido desde el mundo antiguo, la moneda es un medio de difusión de imágenes y de propaganda muy rápido y eficaz.
Imagen: retrato real en una moneda bracteada de la ceca de Augsburgo (1190-1200), procedente del tesoro de Waal. Foto: Nicolai Kästner
Las principales cecas del sur de Alemania en esta época eran Augsburgo y Ratisbona y sus acuñaciones se expandieron como modelo gracias a las rutas comerciales. Tesoros descubiertos recientemente abren nuevas perspectivas en este sentido, mostrando que la influencia de estos talleres se extendió a la región del sur de los Alpes y hasta Praga.
Imagen: Tesoro de Obing. Foto: Nicolai Kästner
En portada: la mano de Dios sobre un cielo estrellado en un Pfennig de la ceca de Salzburgo (1180), procedente del tesoro de Oberteisendorf. Foto: Nicolai Kästner
Información e imágenes: Staatliche Münzesammlung München.