Esta nueva moneda de Polonia recuerda la batalla de Zadwórce de 1920, en la que las tropas polacas consiguieron detener el avance soviético. Está acuñada en plata, en emisión limitada y en calidad proof.
El Tratado de Versalles que puso fin a la I Guerra Mundial no trajo la paz para todos los territorios europeos, ya que la descomposición de los grandes imperios dio origen a varios conflictos fronterizos. Uno de ellos fue la guerra polaco-soviética en la que Polonia y la Rusia Soviética se enfrentaron en sus ansias expansionistas. Es en este marco en el que se sitúa la batalla de Zedwórce, que ahora conmemora la ceca de Polonia con una nueva moneda de plata.
La batalla, también conocida como “las Termópilas polacas”, tuvo lugar en agosto de 1920 y tuvo una importancia crucial en el desarrollo de la guerra. En ella, un grupo de soldados polacos resistió el avance de la caballería soviética del general Budyonniy: de los 330 combatientes, 318 perecieron y el resto se suicidaron antes de caer en manos de los bolcheviques. Su heroica defensa hizo al general soviético cambiar su estrategia y desistir de tomar Lviv, a pesar de estar muy cerca y en su lugar dirigirse hacia el Vístula para apoyar a las fuerzas de Mijail Tukhachevsky, pero fue demasiado tarde y de este modo el comportamiento heroico de los defensores de Zadwórce cambió el curso de la guerra.
La Segunda República de Polonia estableció la Cruz Zadwórze para honrar a estos defensores de las fronteras orientales polacas y uno de sus ataúdes reposa en la Tumba del Soldado Desconocido.
En la cara de la moneda podemos ver el retrato de uno de estos héroes: el sargento de 19 años Konstanty Zarugiewicz, polaco armenio, que combatió contra ucranianos y bolcheviques y fue condecorado en varias ocasiones. A título póstumo recibió la más alta condecoración militar de Polonia, la Cruz de Plata de la orden Virtuti Militari, que aparece junto a él en la moneda.
Esta moneda es la primera de una serie que lleva el nombre de “Termópilas polacas” y que tendrá un reverso común, con la imagen de Atenea, diosa de la guerra y de la sabiduría como tema principal. La publicidad que acompaña su lanzamiento habla de las batallas en las que los soldados polacos han estado dispuestos a sacrificar su vida en nombre de la patria.
Con un valor facial de 20 zloty, las monedas de esta serie que acaba de iniciarse están acuñadas en plata de 925 milésimas, en calidad proof, con un peso de 28,28 gramos y un módulo de 38,61 milímetros. Diseñadas por Urszula Walerzak y acuñadas en la ceca de Polonia, se prevé un volumen máximo de 18.000 ejemplares que se encuentran a disposición de los coleccionistas desde el pasado 29 de mayo.
Información e imágenes: Banco Nacional de Polonia.