El pasado 21 de enero la casa de subastas norteamericana Heritage remató el mítico Brasher Doubloon en $9.360.000. Se trata, sin duda, del mejor ejemplar conocido.
La propia casa de subastas catalogaba así la pieza subastada:
1787 DBLN New York Style Brasher Doubloon, EB on Wing, MS65 S NGC. CAC. W-5840.
El doblón Brasher (New York style) es, posiblemente la rareza numismática más famosa del mundo, y el ejemplar de Stickney-Ellsworth-Garrett-Partrick es el mejor de los siete especímenes conocidos. Es una moneda que a cualquier coleccionista le encantaría tener, pero solo uno podrá poseerla. Adquirida por el numismático pionero Matthew Stickney en 1848, la moneda actual se ha ofrecido públicamente solo dos veces en todos los años transcurridos desde su descubrimiento. En ambas ocasiones estableció un precio récord mundial para cualquier moneda ofrecida en una subasta. En su primera aparición, en la venta de Henry Chapman de la colección Stickney en 1907, obtuvo $ 6.200. Este increíble récord se mantuvo durante 22 años. En su segunda oferta, de la legendaria Colección Garrett en 1979, obtuvo un total igualmente espectacular de $ 725,000, un precio récord que no se superó en una década. Por lo tanto, durante más tiempo que cualquier otra moneda, el doblón Stickney Brasher mantuvo el título de “la moneda más valiosa del mundo”. Heritage Auctions tiene el privilegio de ofrecer el mejor ejemplar conocido del célebre doblón Brasher de 1787 en esta oportunidad única en la vida. Junto con los doblones de estilo limeño de 1786, constituyen la primera de las pocas monedas de oro prefederales producidas en los Estados Unidos con el propósito de circular. B. Max Mehl comentó sobre la importancia de estos doblones. “Esta célebre moneda tiene la inusual importancia distintiva de legítimamente incluida en la Serie Colonial Americana, y, como es el primer número de una acuñación de oro privada, también está incluida en esa importante serie. Por interés histórico y rareza numismática, esta gran moneda es insuperable. Estas monedas se produjeron con un alto nivel de peso y pureza que sirvió de ejemplo para la acuñación de oro de este país (Brasher fue contratado como ensayador por contrato para la recién establecida Casa de la Moneda de los Estados Unidos en 1792).
Heritage Auctions