Sorpresas y altos remates en la puja celebrada en Zürich el pasado 26 de octubre, especialmente en la variada sección de moneda europea. Las grandes piezas de moneda antigua siguen su ascenso en las subastas internacionales.
Cerca de dos mil lotes numismáticos fueron subastados la pasada semana en Zürich por la prestigiosa firma Hess Divo. El catálogo de la puja abarcaba desde moneda antigua hasta contemporánea, con importantes secciones dedicadas a moneda europea en general y, en concreto, con amplios capítulos de moneda suiza y de los diferentes territorios alemanes. Ya en la sección de moneda antigua encontrábamos piezas de enorme interés por su calidad y rareza, como podían ser la espectacular tetradracma de Naxos (lote nº 35), que salía a subasta con una estimación de 75000 francos suizos y se ha rematado en 100000. La rarísima estátera áurea de Pantikapaion (lote nº 66), cuya estimación era de 25000 francos, ha sido adjudicada finalmente en 42000.
También muy por encima de sus estimaciones se han vendido las excepcionales piezas de oro ptolemaicas, como la estátera nº 266, con una estimación de 15000 francos, y adjudicada en 32000, o la octodracma nº 267, que subió hasta los 30000 desde los 20000 calculados.
Las rarísimas estáteras de la tribu de los parisii (lotes 286 y 287), que partían con estimaciones de 25000 y 35000 francos suizos, se remataron en 40000 y 46000, respectivamente.
Más moderada se presentó la moneda romana, donde vimos cómo el áureo de Adriano (lote nº 345) en el que aparece acompañado de los retratos de Trajano y Plotina, se quedó en los 40000 francos de la estimación. Sin embargo, el áureo de Galba acuñado posiblemente en Tarraco que se ofertaba con el nº 326, se adjudicó en 14000 francos, cuando partía con un cálculo de 10000.
Sin sobresaltos se quedó el capítulo de moneda bizantina, aunque con alguna subida reseñable, como la del sólido de Teodosio III (lote nº 481), que contaba con una estimación de 4500 francos y se adjudicó en 12000.
Más interesante ha resultado el amplio capítulo de moneda europea, compuesto por más de 1000 lotes que abarcaban desde la Alta Edad Media hasta el siglo XX. Podemos comenzar con la abundante muestra de amonedaciones italianas, en la que se vieron altos remates, como el de una prueba de medalla a nombre de Maximiliano Mª Sforza (lote nº 827), con estimación inicial de 15000 francos y adjudicación en 34000; el carlino de cinco duplas de Victorio Amadeo III, acuñado en Cerdeña en 1786 (lote nº 859), que se remató en 32000 francos o el ejemplar de cien liras de Víctor Manuel de 1872 (lote nº 919), valorado en 20000 francos, que se alzó hasta los 28000.
La espectacular pieza de cincuenta ducados en oro (lote nº 983) que conmemora el matrimonio de Maximiliano José III, elector de Baviera con la princesa María Ana Sofía, hija de Augusto III de Polonia y Sajonia, vio como su precio se elevaba muy por encima de los 50000 francos estimados para adjudicarse en 75000.
Del abundante conjunto de emisiones suizas nos habíamos fijado en nuestro comentario previo a la subasta únicamente en un par de piezas de entre las de mayor valor, en concreto en un ducado de la ciudad suiza de Friburgo (lote nº 1239), acuñado c. 1570, con una estimación de 25000 francos, que se ha rematado en 39000 y, por supuesto, en uno de los varios “vreneli” que se ofertaban, el lote nº 1347, de 1897, que salía a la venta con un precio mínimo de 60000 francos y una estimación de 75000 y que, finalmente se ha adjudicada nada menos que en 130000.
También muy por encima de sus ya altas estimaciones han estado varias piezas de los antiguos territorios de los Habsburgo, especialmente grandes múltiplos en oro o plata de gran rareza, como los 40 ducados de Brandemburgo (lote nº 1628), adjudicados en 71000 francos, o los 10 ducados emitidos en Nüremberg (lote nº 1650), rematados en 70000, por citar sólo un par de ejemplos de todos los posibles.
Las grandes sorpresas de la subasta llegaron con dos pequeñas piezas acuñadas en Checoslovaquia: la primera (lote nº 1541) una prueba de 5 korum de 1921, partía con una estimación de 1000 francos, y la segunda (lote 1543), otra prueba, esta vez de 25 haleru de 1932, con precio estimado de 2000 francos. Cada una de ellas se remató en 30000 francos.
Terminaremos con la representación de moneda española (lotes nº 1478-1525) que se ha vendido en su totalidad en precios, en general, por encima de las estimaciones; así la dobla de la banda de Juan II con la que se iniciaba el conjunto se ha adjudicado en 700 francos, en 1800 excelente de los Reyes Católicos y las onzas de Fernando VI (lotes nº 1497 y 1499) por 3000 y 3400 francos. Termina la muestra con una curiosa medalla fabricada en tiempo de Alfonso XII conmemorando el bicentenario de Calderón de la Barca (lote nº 1522), que partía con una valoración inicial de 6000 francos y se ha adjudicado en 6500.
Autor/a: Redacción