Cuenta atrás para la subasta de Jesús Vico

Cuenta atrás para la subasta de Jesús Vico

Cuenta atrás para la subasta de Jesús Vico 500 250 admin

El próximo jueves 11 de junio se rematarán en sala los 780 lotes de moneda antigua, española y extranjera que la veterana firma madrileña presenta en su catálogo, con algunos ejemplares únicos además de piezas de gran rareza y calidad.

A poco menos de una semana para que tenga lugar un nuevo remate en sala de Jesús Vico S.A. no está de más echar un nuevo vistazo con más detalle por algunos de los lotes que se someterán al veredicto del martillo la tarde del jueves 11.

Una vez más nos encontramos ante una oferta muy completa e interesante, en la que no faltan alguna que otra pieza única junto con otras de enorme rareza, con un alto nivel de calidad y estado de conservación en todos los lotes.

Los aficionados a la moneda antigua encontrarán en esta ocasión un variado surtido de moneda hispánica, a la que acompañan una selección de una veintena de emisiones griegas y, por supuesto, moneda romana. De especial interés es la sección de moneda del imperio, con una interesante muestra de áureos de las primeras dinastías. Entre todos ellos destaca por su belleza este ejemplar acuñado a nombre de Domiciano (lote nº 175), que muestra el retrato del emperador en anverso y en reverso el busto de Minerva. La acuñación podría conmemorar la creación de la Legio I Minervia en el 82 d.C. para combatir en Germania. El precio en catálogo de esta moneda excepcional es de 4.000 euros.

Las series provinciales de Adriano están representadas aquí por dos ejemplares dedicados a África (lote nº 196) e Hispania (lote nº 197), cada uno de ellos con la representación de la personificación de las provincias en el reverso, en el caso de Hispania del modo que se retomaría muchos siglos más tarde en nuestro país en las pesetas a partir del Gobierno Provisional. El precio de salida de este áureo es de 2.000 euros.

Tampoco conviene dejar de lado la selección de grandes bronces que nos ofrece este capítulo, como los sestercios de Calígula (lote nº 147), Vespasiano (lotes nº 170 y 171) o el que vemos, de Antonino Pío (lote nº 211), muy raro, con puja mínima de 3.000 euros.

Del Bajo Imperio les mostramos este sólido de la ceca de Treveris (lote nº 268) del emperador Graciano, en estado de conservación casi excelente a pesar de una fuerte raya en el anverso, por el que se puede pujar a partir de 1.000 euros.

El capítulo de emisiones visigodas, como no podía ser de otra manera en el caso de Jesús Vico, nos depara piezas de enorme interés, como el tremís de Recaredo I de la ceca de Cesaracosta (lote nº 277: salida en 2.200 euros), o el de Sisebuto del taller galaico de Tude (lote nº 291: desde 4.000 euros).

Pero especialmente notable es el tremissis acuñado para Égica en el taller bético de Eliberri (lote nº 302), que es considerado pieza única, y que sale a subasta con un precio en catálogo de 5.800 euros.

Pasamos a los reinos cristianos peninsulares fijándonos en este cuarto de maravedí de seis líneas acuñado por Alfonso X en el taller de Murcia (lote nº 319), pieza muy escasa y que se presenta además a la puja en un estado de conservación excelente, con un precio de inicio de 1.500 euros.

El reinado de Enrique IV nos reserva dos de las joyas de esta sección y podríamos decir que de todo el remate. La primera es un medio enrique acuñado en la ceca de Sevilla (lote nº 332) muy raro y en muy buen estado de conservación, por el que se puede pujar a partir de 5.500 euros.

A continuación, un enrique, esta vez del taller de Segovia (lote nº 333), raro y en excelente estado de conservación, cuyo precio de salida se ha fijado en 7.000 euros.

Saltamos a la corona de Aragón para fijarnos en este ducado o johaní de Juan II (lote nº 337) denominación que marcaría el cambio en la métrica del oro peninsular, si bien tipológicamente no tendría continuidad. Acuñado en la ceca de Zaragoza, es pieza muy rara que se presenta en excelente estado de conservación, por la que se puede pujar a partir de 6.000 euros.

Las acuñaciones a nombre de Fernando el Católico, sin Isabel, nos traen este principado acuñado en Barcelona (lote nº 344), en el que el busto del rey aparece acompañado del escusón de los Sánchez. Es pieza muy rara y en excelente estado de conservación, que sale a subasta desde 5.000 euros.

Le sigue otro ducado, o principado, de la ceca de Perpiñán (lote nº 345) que presenta una marca en forma de omega o u invertida en el anverso detrás de la cabeza del monarca. Pertenece a una emisión muy rara y se presenta en estado de conservación excelente, justificando todo ello un precio de salida de 6.500 euros.

Los Reyes Católicos en pareja tampoco carecen de piezas valiosas, como los dobles excelentes de Sevilla y Toledo (lotes nº 349-350) o los ducados de Valencia (lotes nº 351-356), de los que les mostramos en lote nº 353, en excelente estado de conservación, y con salida en 2.900 euros.

Seguimos con el oro para mostrarles otra posible pieza única: estos cuatro escudos batidos en Sevilla para Felipe II (lote nº 371), con fecha 1591/0 y en muy buen estado de conservación, por la que se ha fijado un precio en catálogo de 1.400 euros.

La llegada de los borbones nos trae onzas como esta hermosa pieza (lote nº 439) batida en Segovia en 1721 para Felipe V, rara y en estado de conservación excelente, por la que se puede pujar a partir de 8.000 euros.

O esta otra, procedente del taller de Méjico (lote nº 461), perteneciente a las primeras acuñaciones realizadas allí a nombre de Carlos III que mantienen aún el diseño de reverso de su antecesor Fernando VI. Con fecha de 1761, muy rara, muy buena conservación y restos de brillo original, sale a subasta en 4.000 euros.

Avanzamos algunos años más para fijarnos en una pieza de plata, un ejemplar de ocho escudos (lote nº 518) que no podía tener una fecha y una procedencia más emblemáticos: Cádiz 1812. La explicación histórica más detallada de esta emisión rarísima la pueden encontrar en el catálogo de la subasta. El precio de esta moneda, en muy buen estado de conservación, es de 3.000 euros.

La representación de moneda española continúa hasta Juan Carlos I, con quien termina el sistema de la peseta. Y a continuación se pasa a la moneda extranjera con un apartado dedicado a moneda islámica no española -algo muy de agradecer, puesto que en la mayoría de catálogos de subasta españoles se junta, inexplicablemente, con la moneda andalusí- y a moneda extranjera de otros países, que suman casi un centenar de lotes, muy variados tanto en fechas como en procedencias: soberanos, dólares o francos conviven aquí con dracmas sasánidas o emisiones carolingias. Así que los coleccionistas de moneda extranjera no tienen más remedio que hacer un repaso detallado por este capítulo, que de seguro les deparará alguna pieza interesante.

El remate terminará con un pequeño capítulo de billetes españoles, que incluye también lotes de conjunto. Recuerden que pueden acceder directamente pinchando sobre el anuncio en la portada de esta revista o en el enlace www.jesusvico.es.

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