Todo preparado para la 37ª edición de este evento que se celebrará entre los días 26 y 29 de abril con la participación de un centenar de expositores de todo el mundo entre comerciantes y editoriales numismáticas. Los días previos se celebrará la subasta de Heritage dedicada a moneda antigua y extranjera.
El hotel Crowne Plaza albergará las actividades que se enmarcan en la trigésima séptima edición de la Chicago Internacional Coin Fair, una de las convenciones más concurridas de los Estados Unidos y que cuenta con la participación de numerosos comerciantes no sólo del país norteamericano sino de todo el mundo.
La feria, con un centenar de mesas expositoras, podrá visitarse desde el jueves por la tarde hasta el domingo. Además de la presencia de firmas numismáticas de primer nivel, tendrán su puesto las principales editoriales y publicaciones periódicas dedicadas a la numismática. Paralelamente al desarrollo de la feria tendrán lugar una serie de encuentros paralelos de diferentes temáticas relacionadas con el mundo de la numismática y el coleccionismo.
Asimismo, los días 24 y 25 se celebrará la subasta organizada por la firma Heritage, en la que saldrán a la puja más de cinco mil lotes de monedas antiguas y extranjeras. De la primera de las secciones hay que destacar los casi trescientos lotes de moneda griega, con ejemplares interesantes como una tetradracma de Himera (lote nº 23026), firmada por el grabador MI, u otra de Selinus (lote nº 23032), ambas con una puja mínima de 5000 dólares y una estimación de 10000. Sin dejar Sicilia, encontramos una hermosa decadracma siracusana de época de Dionisos I (lote nº 23040), valorada en 12000 dólares y una de las raras piezas con el posible retrato de Aníbal y un elefante en el reverso, que se atribuyen a esta isla o a Cartago (lote nº 23058). Sale a subasta a partir de 10000 dólares.
Una de las joyas de este capítulo es una estátera lidia de oro (lote nº 23146), fechada a finales del siglo VI, con posterior al reinado de Creso, para la cual la puja mínima es de 8750 dólares, aunque su estimación es del doble.
También es posible encontrar ejemplares rarísimos de distintos reinos orientales, desde aqueménidas a seleúcidas, además de piezas procedentes de Judea y la costa del levante mediterráneo.
La oferta de moneda romano-republicana nos presenta un completo surtido de denarios de todas las familias, con piezas de gran calidad, aunque la variedad es mayor al llegar al Imperio, donde cobran protagonismo las monedas en otros metales. Poco habitual es el dupondio de Calígula que saldrá a subasta con el nº 23381 a partir de 2000 dólares y, también aes, hay que destacar un bonito sestercio de Vespasiano perteneciente a las series de Ivdaea Capta (lote nº 23402), a partir de 1500 dólares. Entre las piezas áureas, el lote nº 23382, de Tiberio con una imagen de Livia entronizada en el reverso, se subasta desde 3500 dólares; más raro y valioso es el emitido por Antonino Pío a nombre de su predecesor Adriano (lote nº 23409),que muestra a éste divinizado. Su precio de inicio es de 6500 dólares, con una estimación de 13000.
Por lo que se refiere a la abundantísima oferta de moneda extranjera, hay que recordar a los coleccionistas españoles que las series emitidas a lo largo del imperio español se encuentran clasificadas como pertenecientes a cada uno de los países actuales. De este modo, encontrarán piezas españolas acuñadas en ultramar en Bolivia (lotes nº 23621-23626), Chile (23813-23837), Colombia (nº 24060-24090), Guatemala (lotes nº 24865-67), Méjico (25091.25119), Filipinas, Perú, Países Bajos, etc. Ni qué decir tiene que las onzas y medias onzas tienen un papel protagonista en estos capítulos, con diferentes raros de rareza y conservación y, en una proporción muy importante, encapsuladas.
La representación española está formada por 78 lotes que abarcan emisiones principalmente en oro desde Pedro I hasta Juan Carlos I. Sin embargo, la palma de este apartado se la lleva, sin duda, el cincuentín que sale a subasta con el nº 25579. Esta pieza, una de las reinas de la historia numismática española, fue acuñada en el Real Ingenio de Segovia; en el caso de este ejemplar, en el año 1626. La puja mínima por esta moneda excepcional, aunque en no demasiado buen estado de conservación, es de 10000 dólares, si bien su estimación alcanza los 20000.
Como curiosidad, y por cerrar el apartado de emisiones españolas, les informamos de que encontrarán algunos dinares acuñados en al-Andalus dentro del capítulo denominado “dinastías islámicas” (lotes 24938 en adelante).
En el resto de países, es apabullante el número de entidades territoriales que se encuentran representadas en la subasta, algunas de ellas difíciles de localizar en el mapa para quienes no estén muy duchos en geografía. Cuenta con una presencia importante la moneda china, así como la procedente de Gran Bretaña y, por supuesto, la de Rusia, con algunas de las piezas en oro y platino con valoraciones más altas de todo el catálogo, – valga como ejemplo este ejemplar de 12 rublos en platino de Nicolás I (lote nº 25389), año 1831, con salida en 20000 dólares- aunque no conviene dejar de lado el interesante lote de monedas brasileñas, que podría sorprendernos.