El próximo miércoles 29 de mayo la firma barcelonesa sacará a subasta casi mil doscientos lotes de emisiones extranjeras a lo largo de dos sesiones. Monedas de los cinco continentes, desde antiquísimas emisiones anteriores a nuestra era hasta el siglo XX.
La segunda de las subastas que ha preparado Áureo & Calicó para este mes de mayo está dedicada en exclusiva a la moneda extranjera, para la que ha reservado un día completo, el miércoles 29, en sesiones de mañana y tarde. La oferta, con un total de 1185 lotes, presenta una enorme variedad de países y fechas, aunque predomina la moneda moderna y contemporánea. Sin embargo, es posible encontrar curiosidades como las monedas chinas en forma de instrumento, fechadas antes de nuestra era, o alguna moneda islámica de época medieval.
Precisamente China, con más de un centenar de lotes, es uno de los países con representación más abundante de los que forman la sesión matutina que abarca, por orden alfabético, de Albania a Francia. De esta primera parte de la subasta habrá que fijarse en los resultados de las monedas brasileñas, una de las potencias emergentes también en el mercado numismático, de la que se ofertan ejemplares como los 10000 reis de Juan V (lote nº 3151), de 1724, con un precio de inicio de 5000 euros, o los 20000 reis del mismo monarca, de 1727 (lote nº 3152), a subasta a partir de 3000.
También abundante es la representación de emisiones de los Estados Unidos (lotes nº 3298-3344) que van desde los 2 centavos a los múltiplos del dólar, así como lotes de conjunto. Estos 20 dólares acuñados en San Francisco en 1915 (lote nº 3338) tienen un precio de salida de 1100 euros.
Aunque por variedad y valor de las piezas, sin duda destaca Francia, con más de ciento cincuenta lotes (nº 3360-3517), y ejemplares de gran belleza, como los de Luis XIII y Luis XIV (lotes 3376, 3377 o 3401, por ejemplo). La pieza que vemos es un écu acuñado en París en 1642 para Luis XIII (lote nº 3377), cuyo precio en catálogo es de 1900 euros.
En oro sobresalen los dos luises de Luis XV (lote nº 3490), de 1717, con salida en 2100 euros, pero sobre todo, por su rareza y su estado conservación, casi sin circular, el medio luis del mismo año que se subastará con el nº 3483 y 4000 euros de inicio.
Entre las rarezas de esta primera sesión hay que comentar la presencia de varios lotes de la serie conmemorativa que Cuba dedicó a José Martí en 1988, todos ellos con volúmenes de emisión muy limitados, como los 12 ejemplares que formaron la tirada de 50 pesos, uno de los cuales sale a la puja con el nº 3276 a partir de 1100 euros, o los 50 ejemplares de la serie con facial de 100 pesos, de la que es muestra el lote nº 3277, con salida en 1500 euros.
La sesión de tarde comienza con las emisiones de Grecia que nos deparan algunos de los lotes con mayor precio de salida de esta parte de la subasta, como los ejemplares de cinco dracmas acuñados por Otón I, el primer rey de la Grecia moderna, en 1833 (lote nº 3545) y en 1851 (lote nº 3546), este último con salida en 4700 euros.
Aunque el capítulo más abundante, y uno de los más interesantes, es el de Inglaterra, con más de doscientos lotes (nº 3608-3813) de las más diversas denominaciones, incluyendo lotes de conjunto y piezas que se remontan a los siglos XVII y XVIII. De estas últimas podemos destacar una media corona (lote nº 3642) y una corona (lote nº 3655) del año a 1703, de la reina Ana, ambas con la alusión a VIGO, con salida, respectivamente, en 2500 y 3000 euros, o la corona de Jorge II de 1746 (lote nº 3657), con leyenda LIMA, también a partir de 3000 euros.
Ya en oro, nos remontamos al siglo XVII para fijarnos en estas cinco guineas de Carlos II (lote nº 3799), acuñadas en 1680, muy raras y con restos de brillo original, por lo que su precio de salida asciende a 4500 euros.
Jorge IV se lleva la palma en cuanto a monedas con mayor precio de salida en este capítulo gracias a la pieza de dos libras de 1826 (lote nº 3804), muy rara y proof, que se subastará a partir de 7000 euros.
Aunque muy por encima se sitúan sus cinco libras del mismo año (lote nº 3809), también pieza rarísima y proof, por la que la puja mínima es de 12000 euros.
Bajo el epígrafe de Italia se recogen las emisiones de sus diferentes territorios, casi en su totalidad en plata, y con la enorme variedad de denominaciones por todos conocida, más si nos remontamos incluso al siglo XVI. Podemos destacar algunas de las piezas acuñadas bajo el imperio español, como ducatones o felipes.
Igualmente, de las emisiones procedentes de los Países Bajos podemos destacar las realizadas durante la etapa de ocupación española, con ejemplares como este escudo felipe acuñado en Bruselas en 1578 (lote nº 3948) para Felipe II, con un precio de salida de 2500 euros.
Volvemos atrás para fijarnos en una de las grandes rarezas de la subasta: esta moneda mejicana de doce onzas (lote nº 3937), considerada una pieza única acuñada con motivo del quinto aniversario del panda Tohui, que fue el primero de su especie en crecer y sobrevivir fuera de China. El precio de inicio de esta excepcional pieza es de 12000 euros.
Seguimos en América para detenernos en dos rarísimas pruebas de moneda de Perú, ambas del siglo XIX. La primera (lote nº 3999) es una prueba para ocho reales de Cuzco de 1835, realizada en Francia, con puja mínima de 2200 euros; la siguiente, de 1855 (lote nº 4000), es una prueba de un peso de Lima y su precio de salida se ha fijado en 3200 euros.
Finalizaremos este somero repaso en Suiza, uno de los países con mejor representación en lo que se refiere a piezas valiosas, y más de un centenar de lotes con gran variedad de procedencias y monedas que se remontan en sus fechas incluso al siglo XVI. Podemos empezar fijándonos en este taler de la concordia (lote nº 4073) batido en Berna en 1826, que sale a subasta a partir de 11000 euros.
De la misma ciudad pero ya de 1928 es este ejemplar de cinco francos (lote nº 4158), extraordinariamente raro y en excelente estado de conservación, por el que se puede pujar a partir de 10000 euros.
Estas últimas son dos de las monedas con mayor valor inicial de la subasta, pero resulta difícil seleccionar las más interesantes entre la gran variedad de procedencias, cronologías y denominaciones que ofrece este catálogo que, sin duda, hará las delicias de los aficionados a la moneda extranjera.