La Subasta Rápida XLII de Cayón, dedicada exclusivamente a medallas, se cerró el pasado viernes 30 de junio con un excelente porcentaje de ventas y más de una sorpresa en las adjudicaciones.
Medallas españolas desde Carlos V a Juan Carlos I, junto con dos magníficos ejemplares de las conocidas como Judenmedaillen, formaban la oferta que remató Cayón en su Subasta Rápida del pasado viernes 30 de junio. Una vez más hay que señalar el éxito obtenido, ya que el porcentaje de lotes adjudicados superó el 90% del total, pero además se vieron algunas subidas muy llamativas.
El primero de los lotes en someterse al veredicto del martillo fue esta magnífica pieza que reproduce la Gran Dobla se Pedro I (lote nº 2998) y cuya labra podría haberse realizado en el siglo XVIII. Desde 9.000 euros de salida, su precio final se situó en 10.250.
A continuación, la otra Judenmedaille (lote nº 2999), que tomaba como modelo de anverso la conocida medalla de Carlos I obra de Hans Reinhart, se cubrió en sus 18.000 euros de salida.
También inspirada en el mismo retrato del emperador labrado por Reinhart, esta otra medalla de plata (lote nº 3026), reproducción del siglo XVIII o del XIX, subió de 100 euros de puja mínima a 540 de adjudicación.
El trío de grandes piezas de oro se completaba con la medalla dedicada a la Proclamación de la Constitución de Cádiz de 1812 (lote nº 3000), labrada por Félix Sagau, de la que únicamente se acuñaron en oro 16 ejemplares, que lamentablemente no se adjudicó.
Hay que señalar, en cambio, la buena acogida que tuvieron algunas medallas de proclamación de este monarca, lo que dio lugar a subidas extraordinarias. Empezamos con esta de Guatemala (lote nº 3056), obra de Pedro García Aguirre, por la que se había fijado una puja mínima de 80 euros que quedaron muy por debajo de los 1.300 en los que se remató.
Esta otra medalla (lote nº 3058) fue mandada acuñar por el colegio de San Ildefonso de Méjico, posiblemente para que sus miembros la lucieran durante la proclamación real. Su precio de salida era de 20 euros, que se convirtieron finalmente en 825 de martillo.
Y a continuación esta otra, correspondiente a la ciudad peruana de Puno (lote nº 3059), en estado de conservación casi excelente, pasó también de 20 euros de salida a 750 de adjudicación.
En todos estos casos hablamos de subidas porcentualmente muy altas, que en algunos lotes podrían pasar desapercibidas ya que los precios de salida eran muy bajos, como sucede con esta otra medalla (lote nº 3098), labrada por Fernández Pescador como Premio al Mérito de la Escuela de Pintura, Escultura y Grabado. Su precio de inicio era de tan solo 10 euros, que se convirtieron tras la puja en 580.
Y terminamos con esta otra pieza (lote nº 3192) que desde unos modestos 30 euros en catálogo, consiguió un remate de cuatro dígitos. La medalla, grabada por Lorenzo Coillaut Valera en 1924, representa en el anverso al rey Alfonso XIII y al presidente de El Salvador y en el reverso a Isabel la Católica. El precio de martillo fue de 1075 euros.
Recuerden que pueden consultar todos los resultados de esta subasta en la página web de Subastas Cayón (www.cayon.com ) o pinchando sobre su anuncio en la portada de esta web.