Obligaciones utilizadas como billete bancario en la provincia de Tarragona

Obligaciones utilizadas como billete bancario en la provincia de Tarragona

Obligaciones utilizadas como billete bancario en la provincia de Tarragona 200 283 admin

Tal como hemos comentado en artículos anteriores en determinadas zonas de España, algunas sociedades, especialmente bancarias o de crédito, pusieron en circulación obligaciones para ser utilizadas como papel moneda y que fueron acogidas por el público sin dificultad. Una de estas zonas fue Tarragona y sus obligaciones aparecen con cierta asiduidad en el mercado por lo que consideramos útil, aunque su coleccionismo sea minoritario, intentar una catalogación de ellas.

Sociedad de Crédito Banco de Valls

Constituida el 27 de Noviembre de 1881, con un capital social de 10.000.000 pesetas dividido en acciones de 500 pesetas. Tuvo un crecimiento espectacular en la primera década del siglo XX, momento de mayor auge. En 1977 pasó a denominarse Banco Hispano Industrial y en 1979 fue absorbido por el Banco Hispano Americano.

Las emisiones que conocemos de esta entidad son las siguientes:

Emisión 1 abril 1882, valor de 25 pesetas.

Aunque solo conocemos un único ejemplar de valor 25 pesetas damos por supuesto la existencia de más valores.

A partir de esta fecha todas las obligaciones, de un mismo valor, tienen idéntico diseño del anverso, variando, solamente, las leyendas de emisión, el color del fondo de la impresión, así como las grecas u orlas de corte de la matriz. En el reverso se disponen las casillas para las anotaciones del pago de intereses.

Las obligaciones de 25 pesetas llevan la imagen de D. Pablo de Baldrich; las de 50 pesetas, la del almirante Bonifàs; las de 100 pesetas, la del marqués de Vallgornera; las de 200 pesetas la del obispo Palau y las de 500 pesetas, la de D. Pedro Antonio de Veciana.

Emisión 1 abril 1892, valores de 25, 50, 100, 200 y 500 pesetas.

Las dimensiones de la impresión del anverso, son de 169 mm. de longitud y 135 mm. de altura, sin considerar las orlas de corte de la matriz. El conjunto de la obligación es de mayores dimensiones que el de las de las emisiones siguientes, del orden de los 2,5 cm. de longitud. El papel carece de marca al agua.

Estas obligaciones están numeradas en negro y validadas con tres firmas en el anverso, director, administrador y cajero, la de secretario en reverso y un sello en seco de la entidad, en el centro de la obligación, de 53 mm. de diámetro.

Emisión 1 julio 1892, valores de 25, 50, 100, 200 y 500 pesetas.

Las características de esta emisión son iguales a la anterior del mismo año.

Emisión 1 julio 1911, valores de 25, 50, 100, 200 y 500 pesetas.

Las dimensiones de la impresión del anverso, son de 166 mm por 132 mm. El papel carece de marca al agua pero como medida de seguridad se ha hecho que la impresión, de la leyenda de los fondos de anverso y reverso “Banco de Valls” de los fondos sean coincidentes. Estas características son iguales para la emisión de Octubre.

La validación para circulación se efectúa con las tres firmas del administrador, director y cajero y sello en seco, redondo, de la entidad en el centro de la obligación. Lleva, además, una rúbrica en reverso, justificativa del pago de timbre, y dos rúbricas mas en el corte de la matriz de forma que queden ambas partidas al separar la matriz. La numeración se efectúa en rojo

Emisión 1 Octubre 1911, valores de 25, 50, 100, 200 y 500 pesetas.

Emisión 1 Octubre 1921, valores de 25, 50, 100, 200 y 500 pesetas.

Las características de las obligaciones de las emisiones de 1921 y 1922 son iguales a las de las emisiones de 1911 a excepción de la doble impresión del valor, en negro, en el reverso. En cuanto a las validaciones de puesta en circulación son idénticas a las de las emitidas en 1911, con la salvedad de que el sello en seco está colocado en la esquina superior izquierda. Las emisiones de 1921 y 1922 están efectuadas sobre papel de “Crane & Co Dalton Mass 1920 Bond nº 18”.

Emisión 1 enero 1922, valores de 25, 50, 100, 200 y 500 pesetas.

Los ejemplares firmados son escasos, pero se conocen de todos los valores y series; algunos, de las primeras emisiones, se encuentran sellados con tampón “AMORTIZADA”.

Existen gran número de ejemplares con matriz, no puestos en circulación, algunos de ellos con numeración. Desconocemos si existen de todas las fechas y valores, por ser excedentes en el banco, o solo de algunos valores por ser sobrantes de imprenta.

También son muy abundantes los ejemplares de la emisión de 1892, parcialmente impresos, careciendo de todas las leyendas del interior de la orla.

Conocemos ejemplares de las emisiones de 1911, numerados con valores altos, que están validados con las tres firmas de la dirección y una del corte de matriz y, por consiguiente, a falta de una de las rúbricas en el corte de matriz y la del reverso de utilización del sello de timbre. Estas obligaciones carecen en su reverso del fechado de haberse pagado algún dividendo por lo que tenemos serias dudas de que se hayan puesto en circulación a pesar de que algunas presente aspecto deteriorado.

Desconocemos el por qué de este estado “intermedio” y solo podemos aventurar que se trate de títulos preparados en el banco para ser puestos en circulación de forma inmediata, sin separar de la matriz, momento en que se harían las dos últimas rúbricas.

Sociedad de crédito banco de Reus de Descuentos y Préstamos

Autorizada su creación como banco provincial de emisión con fecha de 26 de diciembre de 1862 con el nombre de Banco de Reus, por lo que emitió billetes válidos legales. No se fusionó con el Banco de España, sino que se liquidó a finales de 1874, transformándose en Sociedad de Crédito Banco de Reus de Descuentos y Préstamos, el cual fue absorbido en 1934 por el Banco Hispano Colonial, que a su vez fue absorbido por el Banco Central a principios de los años 50.

Fue el caso más paradigmático de emisión de obligaciones con el fin de su utilización como papel moneda, y fue de los últimos en retirar de la circulación sus obligaciones. Su circulación fue tan amplia que las obligaciones eran admitidas como billete bancario por el Banco de Cataluña, Banco Comercial de Tarragona, Banco de Tortosa y Caja de Crédito y Ahorro de Vendrell.

La importancia que le daba la entidad a la obligación, por ser utilizada como billete, y lo que eso conllevaba de prestigio, problemas antifalsificación, conservación, etc., se refleja en la importancia que se le da a las calidades del papel y de la impresión y que culmina con la búsqueda, para su tercera emisión, de uno de los mejores y más prestigiosos grabadores de la época, como es Vaquer. Se efectuaron tres emisiones.

Emisión 1 enero 1901 (Series A, B y C), valores de 50, 100 y 500 pesetas.

Emisión 1 enero 1911 (Series D, E y F), valores de 50, 100 y 500 pesetas.

Las dimensiones de la impresión del anverso, sin considerar la orla de corte de la matriz, de las dos emisiones anteriores, es de 176 X 133 mm.

Emisión 1 enero 1921 (Series G, H y I), valores de 50, 100 y 500 pesetas.

Las dimensiones de la impresión del anverso, sin considerar la orla de corte de la matriz es de 172 X 137 mm. Fueron impresas por “Grafics Navas” de Reus,

Los ejemplares de la primera emisión, que son los que se hallan con más frecuencia, se encuentran con matriz, sin firmas y sin número. Los ejemplares de la segunda emisión son iguales a los de la primera pero sin reversos, al menos los conocidos por nosotros, ya que no conocemos ningún ejemplar circulado Por otra parte, tampoco tenemos constancia de ningún ejemplar de la serie F, correspondiente a las 500 pesetas

Los ejemplares de la emisión de 1921 se encuentran sin matrices, numerados y sin la firma del cajero, pero llevan impresas las del director y consejero. Es muy curioso que a pesar de ser impresas las firmas del director y consejero, se pueden encontrar firmas diferentes para un mismo valor de obligación.

Los ejemplares firmados y circulados son extraordinariamente raros, especialmente los de las dos primeras emisiones.

Banco de Tarragona

El banco, creado por real decreto del 25 Junio 1864, emitió billetes, con autorización estatal, hasta la supresión del privilegio de emisión de los bancos provinciales, en Marzo de 1874. Renunció a fusionarse con el Banco de España por lo cual continuó como banca comercial manteniendo el mismo nombre. Posteriormente a su renuncia a la integración con el Banco de España, emitió obligaciones para su utilización como billetes los cuales debieron circular ya que el ejemplar conocido tiene anotación de pago de intereses en su reverso. Desconocemos si se emitió algún otro valor.

Emisión 1 de enero 1875, valor de 100 pesetas (Serie B).

Autor/a: Ramón Cobo Huici

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