Las firmas barcelonesas cerraron la temporada de subastas numismáticas con los buenos resultados de su remate del pasado jueves 6 de julio. Tanto la moneda española como la extranjera y los billetes contaron con una muy buena acogida entre los coleccionistas.
Se acercan las vacaciones de verano y termina la temporada de subastas numismáticas en España. Entre los últimos remates celebrados este mes de julio se sitúa el de las firmas barcelonesas Martí Hervera, Soler y Llach, que subastaron su último catálogo en sala el pasado jueves 6 de julio, con muy buenos resultados. La mejor prueba de ello es que el porcentaje de ventas superó el 80% del total, sin que apenas hubiera diferencias reseñables entre los diferentes capítulos. Tampoco hubo subidas excesivas en los precios de martillo, ni demasiadas sorpresas para comentar. En cualquier caso, aunque desde estas líneas digitales les comentemos algunos de los remates a nuestro juicio más destacables, pueden acceder a la lista de adjudicaciones completas y a los lotes disponible desde las páginas web de ambas firmas: www.subastashervera.com o www.soleryllach.com o pinchando sobre el anuncio de las firmas en la portada de esta revista.
Empezando por la moneda antigua, el precio de martillo más alto lo consiguió una vez más un áureo, en concreto este que vemos de Tito (lote nº 115) del año 74 d.C., con la Fortuna en el reverso, que se adjudicó en 2.300 euros, cuando su salida era de 2.000.
Un capítulo muy interesante de este catálogo era el de las acuñaciones andalusíes y de otras dinastías islámicas, del que habíamos llamado su atención sobre un interesante grupo de dinares. Sin embargo la mayor subida de esta sección recayó en este dinar (lote nº 180) acuñado en Al-Qahira (El Cairo) en el 589 h., inédito, que pasó en la puja de 700 euros de inicio a 1.600 de remate.
Pocas sorpresas también en las acuñaciones de la monarquía española, donde el castellano de los Reyes Católicos de Sevilla (lote nº 232) no se adjudicó y estos rarísimos estos tres reales (lote nº 234) de Carlos I de Barcelona, de la expedición a Túnez, se remataron en 2.675 euros frente a sus 2.400 de salida.
Entre los precios más altos de la sección se colaron estos dos escudos de Carlos IV batidos en Santiago (lote nº 317), con fecha 1808/7, en muy buen estado de conservación, que consiguieron un precio de martillo de 2.800 euros.
También de Santiago y con el busto de Carlos IV, aunque a nombre de Fernando VII, salía a la puja esta pieza de ocho escudos (lote nº 349) del año 1817/2/3, en excelente estado de conservación. Con un precio inicial modesto, 765 euros, realizó en la puja 1.800, más del doble de su salida.
La curiosa medalla de oro acuñada por Numisma con motivo de la proclamación de Juan Carlos I (lote nº 476) pasó de 5.200 euros en catálogo a 5.400 de martillo.
En cuanto a la moneda extranjera, el nivel de adjudicaciones continuó siendo alto, como en el resto del remate, sin subidas llamativas pero con un alza porcentual más alta en el caso de las acuñaciones en oro, tales como los dólares estadounidenses. Este ejemplar que vemos, por ejemplo (lote nº 700), 20 dólares acuñados en San Francisco en 1910, pasó de 950 euros en catálogo a 1.120 de remate.
Para terminar hay que señalar el buen estado en el que se mantiene el mercado de billetes españoles y como muestra solo hace falta ver el resultado obtenido por estas 1.000 pesetas de la emisión de 1 de mayo de 1895 (lote nº 842), que subieron de 2.400 euros de inicio a 3.300 de martillo.
En resumen un buen cierre de temporada para Martí Hervera, Soler y Llach, que ya están trabajando en su próxima subasta numismática anunciada para el 26 de octubre.