Según informaciones del Magyar Nemzeti Bank, Banco Nacional de Hungría, los billetes de 200 florines que se retiran de la circulación próximamente, servirán para calentar estufas, entre otras funciones alejadas de las transacciones económicas.
Las autoridades húngaras planean retirar todos los billetes con valor nominal de 200 florines, que gozaban de gran popularidad entre la población, para el próximo día 16 de noviembre, quedando sustituidos por monedas del mismo valor que ya están en circulación.
Los populares billetes verdes de 200 florines, con medidas de 140 x 70 mm., reproducen en su anverso la imagen del rey Károly Róbert y en su reverso el castillo Diósgyőr.
El papel moneda retirado será destruido y triturado, formando bloques de papel compactos que servirán para producir 40 toneladas de briquetas (especie de ladrillos) especiales que se destinarán a la calefacción. El Banco Nacional piensa entregar el nuevo tipo de “leña” a las organizaciones benéficas las que, a su vez, la distribuirán gratis entre familias rurales pobres.