Vacas y trenes en las nuevas monedas suizas

Vacas y trenes en las nuevas monedas suizas

Vacas y trenes en las nuevas monedas suizas 401 400 admin

Continúan las series dedicadas a las costumbres del país alpino y a sus ferrocarriles de montaña con las piezas dedicadas a la lucha de vacas y al centenario del tren a Jugenfrau.

El pasado fin de semana la ceca suiza presentó en la feria de Basilea las primeras de sus monedas conmemorativas para este 2012 que acaba de iniciarse. Ambas piezas continúan series ya conocidas, como son la de costumbres suizas y la de ferrocarriles de montaña.

La emisión dedicada a costumbres suizas comenzó el pasado año con una pieza dedicada al tradicional mercado de cebollas de Berna, la Zibelemärit. Por el contrario, con la moneda que acaba de presentarse, concluye la serie con los ferrocarriles de montaña como tema, en la que hemos visto los de Vitznau-Rigi (2008), Brienz-Rothorn (2009), Bernina (2010) y Pilatus (2011).

Por su temática la más llamativa de estas dos piezas quizás sea la que representa la lucha de vacas, una tradición que se celebra cada año en el cantón del Valais, el más meridional del país. Se trata de una competición que aprovecha el fuerte instinto jerárquico de las vacas de la raza Hérens, que se pelean por ser la líder del rebaño y, en consecuencia, la que tiene derecho a mejor pasto. Las luchas se celebran a nivel local y después regional hasta elegir a la “reina de las reinas”. Estas peleas congregan gran cantidad de público desde 1921 y permiten a la vaca ganadora alcanzar un alto precio en el mercado.

Esta moneda está fabricada en cuproníquel con un anillo exterior de aluminio bronce, tiene un peso de 15 gramos y un diámetro de 33 milímetros. Su valor facial es de 10 francos suizos y se acuñará en calidad sin circular, hasta un máximo de 94000 piezas, y en calidad proof, en una emisión limitada a 12000 unidades.

La segunda de las monedas está acuñada en plata de 835 milésimas, tiene un peso de 20 gramos y un módulo de 33 milímetros. Se presenta en calidades proof o normal, con volúmenes de emisión de 7000 y 50000 unidades respectivamente, y tiene un valor facial de 20 francos suizos.

El centenario del tren hasta Jugenfrau sirve de colofón a la serie dedicada a los ferrocarriles de montaña. Tras dieciséis años de denodada lucha contra la montaña, el 1 de agosto de 1912 se realizó el primer viaje de este tren. La estación de llegada, la de Jungfraujoch, con sus 3454 metros sobre el nivel del mar, es considerada la más alta del mundo. Esta vía ferroviaria da acceso a la región conocida como “Alpes suizos Jungfrau Aletsch”, declarada patrimonio de la UNESCO.

La moneda presenta en su anverso la imagen de dos trenes, uno antiguo y otro moderno, entre un paisaje alpino, acompañadas de las fechas del centenario. El reverso es el común a las emisiones suizas, con la leyenda referida a la confederación Helvética, el valor en el centro, el año de emisión y la marca de ceca B correspondiente a Berna.

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