Con un buen porcentaje total de ventas, en la subasta del pasado jueves 5 de mayo destacaron los remates de la moneda española del Sexenio Revolucionario y sobre todo de los billetes, que consiguieron subidas muy importantes.
El pasado jueves 5 de mayo tuvo lugar en Barcelona un remate más en sala de las firmas Martí Hervera, Soler y Llach, que se repartió en sesiones de mañana y tarde. En el transcurso de ambas fueron pasando por el veredicto del martillo hasta un total de 1.200 lotes de monedas antiguas, españolas, extranjeras y billetes que en general obtuvieron un buen porcentaje de ventas, aunque con diferencias en los distintos apartados.
De la sesión de mañana, que comprendía la moneda antigua y la española hasta la caída de Isabel II, podríamos comenzar destacando la subida de este áureo de Augusto (lote nº 119) con el conocido tipo de Cayo y Lucio, que pasó en la puja de 2.500 de inicio a 5.300 de remate.
La mañana transcurrió sin alzas excesivas, aunque sí se vieron buenos remates como los de este castellano de Toledo (lote nº 280), adjudicado en 2.700 euros, o también entre las acuñaciones de los Reyes Católicos, el doble excelente de la misma ceca (lote nº 281), que alcanzó los 3.250.
Ya en pleno siglo XIX, estos cuatro escudos (lote nº 593) batidos en Guatemala en 1817 para Fernando VII, pieza muy rara y en excelente estado de conservación, pasaron de un precio en catálogo de 2.600 euros a 4.000 de martillo.
Sin embargo, la mayoría de los ojos estaban puestos en la sesión de tarde, que presentaba como plato fuerte un excepcional surtido de acuñaciones del denominado Sexenio Revolucionario. Los resultados en general fueron buenos, pero también hay que decir que una buena parte de las piezas que salían a subasta con precios más altos no se vendieron, y así sucedió con las 100 pesetas en oro de 1870 (lote nº 669), o las 25 pesetas de Amadeo I (lote nº 686).
En cambio, la moneda de 5 pesetas de 1869 (lote nº 664), se remató en 34.000 euros, por encima de sus 30.000 de salida y se adjudicaron todos los ejemplares del pretendiente Carlos VII también por encima de su puja mínima.
La moneda extranjera también deparó alguna subida fuerte, como la de este ejemplar de 1 dólar estadounidense de 1795 (lote nº 953), que pasó de 900 euros de precio en catálogo a una adjudicación de 4.000.
Con pocas dudas, el capítulo que se puede considerar más exitoso fue el de los billetes extranjeros “specimen” (lotes nº 1073-1120), adjudicados en su totalidad y todos muy por encima de sus precios de salida. No defraudó el remate de los 10.000 dólares de Malaya (lote nº 1107), emitidos bajo el reinado de Jorge VI, que pasaron de 12.000 euros en catálogo a 25.000 de remate.
Pero porcentualmente hubo muchos otros billetes que consiguieron subidas más importantes, como sucedió con este de 500 coronas de Checoslovaquia (lote nº 1080), sin fecha, ni serie ni numeración, que salía a subasta desde 220 euros y fue finalmente adjudicado en 4.100.
La próxima subasta de Martí Hervera, Soler y Llach será en apenas un par de meses, el 7 de julio y como siempre les daremos información de ella puntualmente desde estas líneas digitales.