La subasta de Zúrich del próximo 18 de noviembre presenta tres impresionantes catálogos con cerca de mil lotes de pieza antiguas: la segunda parte de la colección “de un estudiante y su mentor” de moneda romano-republicana, la colección JDL y monedas tardorromanas y bizantinas.
Los amantes de la moneda antigua están de enhorabuena con la oferta que ha preparado Numismatica Ars Classica para su nueva subasta, puesto que, si bien las pujas no estarán al alcance de muchos bolsillos, siempre es posible deleitarse con la sucesión de piezas espectaculares y rarísimas que saldrá a remate.
La subasta se presenta en tres catálogos diferentes y en cada uno de ellos abundan las piezas escasísimas y de enorme valor. Para empezar tenemos la segunda parte de la colección denominada “de un estudiante y su mentor”, cuyos primeros lotes se remataron en primavera en esta misma firma. Las monedas que salen ahora a subasta son un total de 277 piezas romano-republicanas, desde las primeras emisiones anteriores al sistema del denario hasta las series de los imperatores. Aunque es en este último periodo donde se concentran las piezas de mayor precio, todo el catálogo está compuesto por ejemplares de enorme interés. Encontramos didracmas, un par de áureos de la serie Marte-águila, rarísimos denarios acuñados durante la Guerra Social, por no mencionar, por supuesto, variadísimos denarios de todo el periodo republicano.
Entre las rarezas podemos destacar este áureo de Sila (lote nº 110), perteneciente a una de las escasísimas emisiones en oro de la República de Roma, que conmemora su victoria sobre Mitrídates, rey del Ponto. La puja mínima por esta moneda se ha fijado en 48000 francos.
Seguimos con el oro pero avanzamos en el tiempo hasta el segundo triunvirato para encontrarnos con esta moneda que presenta en su anverso el retrato de Marco Antonio (lote nº 224). Pertenece a una rarísima emisión conocida por solo quince ejemplares de los que únicamente cinco se encuentran en manos privadas. Así, no es de extrañar que el precio de salida de esta moneda sea de 64000 francos.
Y solo son dos los ejemplares de propiedad particular entre los escasos conocidos de esta otra serie, también del 42 a.C., aunque en este caso, con el retrato de Octaviano. La moneda que saca a subasta Ars Classica (lote nº 225) tiene un precio mínimo de 32000 francos.
La moneda que parte con una mayor valoración es este otro áureo con el retrato de Bruto (lote nº 236), por el que la puja mínima es de nada menos que 280000 francos, con una estimación de remate de 350000. De nuevo estamos hablando de una rarísima emisión con un innegable interés histórico, además de una acuñación de gran calidad artística plasmada en la calidad del retrato, a pesar de proceder de una ceca móvil.
Marco Antonio y su hermano Lucio ocupan las dos caras de esta otra rarísima pieza (lote nº 250), también en oro, acuñada en el 41 a.C., que pertenece a una rarísima emisión de la ceca móvil del primero conocida por solo cinco ejemplares. La puja mínima por esta moneda se ha fijado en 60000 francos.
Los áureos con el nombre de Q. Voconio son considerados de la más alta rareza, puesto que solo cuatro de los ocho conocidos se conservan en manos privadas. He aquí uno de ellos (lote nº 260), con la vaca en el reverso y en el anverso la efigie de Julio César, por el que se puede pujar a partir de 28000 francos.
Marco Antonio repite retrato en esta otra moneda excepcional (lote nº 263) en la que también encontramos la efigie de Octaviano. La pieza se acuñó en Italia hacia el 40 o 39 a.C. y ahora la vemos en subasta a partir de 24000 francos.
Terminamos este recorrido con un par de denarios. El primero, a nombre de L. Staius Murcus (lote nº 238), acuñado en el 41 a.C., cuyo precio de inicio en la puja se ha fijado en 28000 francos, y muy por encima de él, otra de las grandes rarezas de las acuñaciones republicanas: un denario de Labieno (lote nº 258), con el caballo parto en el reverso. En la primera parte de esta colección salió a subasta un áureo de esta misma emisión que pasó en la puja de 320000 francos de puja mínima a 800000 de remate. No parece que la moneda de plata pueda alcanzar ese precio tan estratosférico, pero los 72000 francos de puja mínima no son nada despreciables.
El segundo de los catálogos que saca a remate Ars Classica está dedicado a la primera parte de de la colección JDL de moneda antigua. Son solo 45 lotes, pero podríamos detenernos un buen rato en cada uno de ellos. Hay moneda griega y romana, sobre todo imperial, con el denominador común de la excelencia de los ejemplares.
Y qué mejor que ilustrar esta afirmación que con una de las espectaculares decadracmas siracusanas (lote nº 281), que se presenta además firmada por Evaineto, y cuyo precio de inicio en la puja se ha fijado en 120000 francos, con una estimación de remate de 150000.
Otro clásico es esta estátera áurea de Panticapea (lote nº 282), con la cabeza de Sileno y el grifo en el reverso, espectacular, que podría alcanzar un precio de martillo de 50000 francos.
Y de clásico a clásico. Ahora frente a una tetradracma ateniense (lote nº 287) con las habituales Atenea y su lechuza, fechada a principios del siglo V a.C. y que sale a subasta a partir de 32000 francos.
Avanzamos hasta el helenismo para fijarnos en esta tetradracma acuñada para Seleuco I de Siria (lote nº 294), en cuyo reverso se combinan las leyendas en griego y en arameo. Espectacular retrato del soberano para una moneda que es la única en manos privadas de los dos conocidos de la emisión. La puja mínima es de 36000 francos y la estimación de 45000.
Pasamos ya a la moneda imperial romana con este espectacular bronce triunfal de Augusto (lote nº 300), de una emisión rarísima y con un retrato del emperador fuera de lo corriente. De ahí su precio de salida fijado en 48000 francos.
No es habitual encontrar precios tan altos en monedas de bronce, pero la rareza y calidad de los ejemplares los justifican. Esto sucede también con el sestercio que estamos viendo (lote nº 305), perteneciente a las series acuñadas por Vespasiano con motivo de la conquista de Judea (IVDAEA CAPTA), por el que se puede pujar a partir de 60000 francos.
O con este doble sestercio de Trajano Decio (lote nº 318), una emisión rara, en un reinado breve y en un excelente estado de conservación, además de una hermosa pátina, lo que han hecho que su precio mínimo sea de 40000 francos.
Entre las monedas de plata destacamos este cistóforo acuñado en Nicomedia para Adriano (lote nº 307), en el que anverso y reverso compiten en detalle, belleza y calidad. La puja mínima se ha fijado en 60000 francos, pero la estimación sube hasta los 75000.
Y aún queda un tercer catálogo en esta espectacular subasta de moneda antigua, que se ha dedicado a emisiones tardo-romanas, bizantinas y de los pueblos bárbaros, con 618 lotes muy interesantes. De nuevo solo podemos mostrarles unos pocos ejemplos como este sólido de Procopio (lote nº 352) de la ceca de Cízico, por el que se puede pujar a partir de 48000 euros.
O este otro (lote nº 374), acuñado para Jovino en la ceca de Treveris en 411-413 d.C., extremadamente raro y con un precio de salida de 32000 francos.
Pero la joya de esta sección es ese tremissis (lote nº 398) acuñado en Mediolanum para el emperador Olibrio. No se preocupen si no conocen su nombre porque se trató de un emperador que reinó solo unos meses allá por el año 472, apoyado por los vándalos y casado con Placidia, hija de Valentiniano III, aunque sorprendentemente para esos convulsos tiempos, falleció de causa natural. Solo se conocen una treintena de monedas de este emperador y este es uno de los seis ejemplares conocidos de su tipo, por lo que no es de extrañar que la puja mínima sea de 120000 francos y la estimación suba hasta los 150000.