Centenario de la I Guerra Mundial

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Centenario de la I Guerra Mundial 400 400 admin

Las principales cecas continúan con sus emisiones conmemorativas de este hecho histórico. Entre las más recientes, el set de seis piezas de la Royal Mint, o el recordatorio al poema “En los Campos de Flandes”, de la ceca de Canadá.

Desde que el pasado año se cumplió el centenario del inicio de la I Guerra Mundial, son muchas las emisiones conmemorativas que se han realizado a lo largo y ancho del mundo, con especial énfasis en las cecas de aquellos países que estuvieron directamente implicados en el conflicto.

Entre las más activas se sitúa la British Royal Mint, que acaba de poner a la venta un nuevo set de seis piezas conmemorativas. Este nuevo lanzamiento forma parte del programa monetario iniciado en 2014 con el que, a lo largo de cinco años, hasta 2018, se intenta contar la historia de la guerra desde su inicio hasta el armisticio haciendo hincapié en distintos aspectos, desde los humanos hasta las innovaciones técnicas, pasando por las batallas decisivas o el impacto cultural.

Las monedas correspondientes a 2015 han sido diseñadas por cinco artistas distintos y presentan seis temas bien diferentes entre sí. La primera de las piezas rinde homenaje a la enfermera Edith Cavell, que trabajaba en un hospital de la Cruz Roja en Bélgica, desde el que salvó la vida y ayudó a escapar a soldados aliados, lo que le valió ser fusilada por los alemanes. La moneda lleva grabada en el canto una frase del poema a Edith Cavell que escribió Laurence Binyon: SHE FACED THEM GENTLE AND BOLD.

Otro héroe de guerra, el aviador Albert Ball, ocupa la segunda de las monedas, retratado con su uniforme y uno de los aviones que pilotaba. La leyenda que le acompaña en el canto refiere a la frase que, según se cuenta, dijo de él Manfred von Richthofen, más conocido como “el barón rojo”, al enterarse de su muerte: BY FAR THE BEST ENGLISH FLYING MAN’ (con mucho, el mejor piloto inglés). Esta moneda y la anterior son obra del escultor David Cornell.

El esencial papel de los animales en las campañas bélicas es reconocido en la siguiente pieza mediante la representación de una mula en plena batalla. El diseño, ideado por David Lawrence, se completa en el canto con la frase PATIENT EYES COURAGEOUS HEARTS tomada el poema de Julian Grenfell “Into Battle”.

Las innovaciones tecnológicas que se desarrollaron en el marco del conflicto están reflejadas en esta colección mediante la moneda dedicada a los submarinos, diseñada por Edwina Ellis. La leyenda esta vez procede de un poema de Rudyard Kipling, “El comercio“, que reza: IN LITTLE BOXES MADE OF TIN (en pequeñas cajas de hojalata).

El barco mercante que vemos desde la cubierta de otro donde descansa un marinero, es el tipo de la siguiente pieza, obra de David Rowlands. La inscripción del canto procede en esta ocasión del poema HMS Bulwark Britannia to Her Lost Seamen, obra de William Trend: SEPULCHRED IN THE HARBOUR OF THE DEEP (sepultados en el puerto de las profundidades).

La batalla de Gallipoli no podía faltar en una colección que recuerda los aspectos más destacados de la I Guerra Mundial. El diseño de esta pieza, creado por John Bergdahl, nos presenta en primer término una escena del desembarco de las tropas y como fondo un mapa de campaña. La leyenda del canto procede en este caso del memorial a Kemal Atatürk, quien mandaba las tropas turcas que repelieron el ataque aliado en Gallipoli. La frase elegida es HEROES THAT SHED THEIRBLOOD (héroes que derramaron su sangre).

Este conjunto de piezas se presenta acompañado de una detallada información sobre cada tema, así como del diseño y del artista que lo ha llevado a cabo. Está disponible en plata esterlina (925 milésimas), modalidad en la que se acuñarán un total de 1915 sets, o en oro de 22 quilates, en el que tan solo se fabricarán 25 sets. Sin embargo, también existe la posibilidad de adquirir cada una de las monedas individualmente. El volumen de acuñación de las piezas sueltas es mayor (2.500 ejemplares, para cada tipo y 5.000 en el caso de las monedas de Gallipoli). En lo que sí coinciden todas es en su mismo valor facial, cinco libras.

Volvemos a la poesía con otra de las novedades que sobre la I Guerra Mundial nos ha presentado recientemente la Royal Canadian Mint. Se trata de la moneda que recuerda el centenario del conocido poema “En los campos de Flandes”, escrito por el teniente coronel John McCrae en el transcurso de la batalla de Ypres (Bélgica). Su sentido homenaje a aquellos que combatieron y dejaron su vida en aquellos campos ha hecho de la amapola el símbolo del recuerdo a los caídos en la contienda.

La moneda fue presentada hace unos días en Ottawa y en ella puede verse una escena en la que un soldado contempla abatido los campos de tumbas entre los que crecen las amapolas, y en la parte izquierda, en gran tamaño, una de estas icónicas flores. Esta nueva emisión se presenta en piezas de una onza de plata, de 20 dólares canadienses de valor facial.

En una denominación aún mayor, 5 onzas, se presenta la segunda pieza de esta serie, de 50 dólares de facial. Con un llamativo acabado coloreado, vemos en ella a dos soldados junto a una sepultura. Como fondo pueden leerse las primeras líneas del poema al que se rinde homenaje.

Como dato curioso hay que añadir que la imagen que aparece en el anverso de estas monedas no es la de la soberana actual Isabel II, sino la de Jorge V, que ocupaba el trono de Gran Bretaña en los años en que transcurrió la I Guerra Mundial.

Información e imágenes: gentileza Royal Mint y Royal Canadian Mint.

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