Las cecas reales de Gran Bretaña, Canadá y Australia, talleres monetarios de la Commonwealth, ofertan un set con sus piezas dedicadas al jubileo de la reina Isabel II. Distintos diseños, valores y estilos para tres piezas de plata con un tema común que protagoniza gran parte de las emisiones de este 2012.
La British Royal Mint, la Royal Canadian Mint y la Royal Australian Mint, las tres cecas oficiales de la Commonwealth, presentan en un estuche tres de sus diseños destinados a conmemorar el gran acontecimiento histórico que supone para estos países los sesenta años en el trono de su soberana Isabel II. Con el permiso de las emisiones dedicadas a los juegos olímpicos de Londres, estas series monetarias están acaparando el protagonismo entre las emisiones conmemorativas británicas, y el interés de los coleccionistas, de modo que algunas de estas series aparecidas en el último trimestre del año pasado y en lo que va de éste, están prácticamente agotadas.
En esta ocasión, la oferta que ha salido al mercado a primeros de mes consta de un conjunto de tres monedas en plata: una pieza de 20 dólares del Canadá, otra de 50 céntimos australianos y una moneda de cinco libras. Cada una de ellas ofrece una visión muy distinta del acontecimiento, tanto en estilo como en tema.
La moneda que representa al Reino Unido es ya bien conocida por nuestros lectores, y presenta en anverso y reverso sendos retratos de la soberana, en su juventud y en la actualidad, con un estilo sobrio y clásico. En esta ocasión se nos presenta en plata esterlina de 925 milésimas, con un peso de 28,28 gramos y un diámetro de 38,61 milímetros.
Por su parte, la moneda diseñada por la ceca canadiense otorga protagonismo al príncipe Felipe, duque de Edimburgo, que aparece retratado junto a la reina en el reverso de la pieza. Ambos aparecen rodeados por un motivo vegetal que combina los diseños florales emblemáticos del Reino Unido —-–la rosa Tudor y el cardo- con las hojas de arce símbolo de Canadá. La propaganda que acompaña esta moneda habla de “una joven princesa que conoce a su príncipe” y narra la manera en la que se conocieron los soberanos británicos.
Esta moneda, con un valor facial de 20 dólares canadienses, está acuñada en plata de 99,99% de pureza, tiene un peso de 31,39 gramos y un módulo de 38 milímetros.
El trío se completa con los cincuenta centavos australianos, acuñados también en plata de 99,9% de pureza, con un peso de 18,24 gramos y un diámetro de 31,51 milímetros. 
La forma del cospel es dodecagonal, queriendo sugerir las facetas de un diamante tallado. El reverso presenta la corona de San Eduardo, símbolo de la monarquía británica, rodeado de la flor de zarzo dorado, especie de acacia que es el emblema floral de Australia.