La firma barcelonesa saca a subasta el próximo 10 de noviembre esta exquisita colección de monedas de Isabel II con cerca de seiscientos ejemplares en altos grados de conservación y con ejemplares de enorme rareza.
La reina Isabel II protagoniza una vez más este año una subasta de Áureo & Calicó. Si en abril fue la colección Permanyer, ahora le toca el turno a la O’Callaghan, que se rematará en sala el próximo jueves 10 de noviembre a partir de las 16:00 h. El reinado de esta soberana fue muy interesante desde el punto de vista monetario por sus sucesivas reformas, y sus acuñaciones siempre cuentan con una muy buena acogida por parte de los coleccionistas. Sin duda esta colección no les va a decepcionar, puesto que como cuenta el catálogo, su recopilador, D. Gabriel O’Callaghan, tenía como criterio seleccionar los mejores ejemplares buscando la perfección, de modo que si hay un hilo conductor en esta oferta es el alto grado de conservación de los 583 lotes de la subasta.
Organizadas por valores, cecas y años, las monedas que saldrán a subasta van desde las pequeñas piezas de un maravedí de cobre hasta los grandes ejemplares de 10 escudos de oro, sin que falten ejemplares de gran rareza. Podemos empezar fijándonos en estos 4 maravedíes (lote nº 38) acuñados en Madrid por el Departamento de Grabado en 1836, muy raros, con brillo original y en estado de conservación casi sin circular, que salen a la puja a partir de 1.200 euros.
O en esta acuñación proof de 8 maravedíes de 1835 (lote nº 69), también de Madrid del Departamento de Grabado, con brillo original y sin circular, por los que se puede pujar desde 1.500 euros.
La que vemos (lote nº 92) junto a estas líneas es una prueba no adoptada realizada en la misma ceca para la moneda de medio real de 1848, rarísima y también en conservación sin circular, que tiene un precio en catálogo de 1.500 euros.
Pasamos a la ceca de Segovia para fijarnos en este medio real, o cinco décimas (lote nº 95) del año 1849, raro y en conservación sin circular, con salida en 1.200 euros.
Este medio céntimo de escudo (lote nº 131) acuñado en Barcelona en 1866, podría ser una prueba y carece de la marca OM. En cualquier caso es la segunda moneda conocida de su tipo, -se presenta en calidad flor de cuño y con brillo original y su precio asciende a 1.500 euros.
La serie de plata es la más abundantemente representada en este catálogo, con ejemplares que llaman la atención por su belleza y grados de conservación. Para empezar les mostramos estos 10 reales de Madrid (lote nº 369), salidos del Departamento de Grabado en 1840, muy rara, con todo su brillo original y en estado de conservación casi sin circular, por los que se puede pujar desde 2.000 euros.
De la ceca de Barcelona nos llegan estos 20 reales en conservación sin circular (lote nº 404), una acuñación proof de 1851, muy rara y un bellísimo ejemplar con un precio en catálogo de 1.500 euros.
Pero posiblemente lo más llamativo de esta sección sea la muestra de piezas de 20 reales de la ceca de Madrid, encabezada por estos del Departamento de Grabado del año 1834 (lote nº 409), en conservación sin circular y pertenecientes a una serie de la que sólo se conocen 10 ejemplares. La puja mínima se ha fijado en 9.000 euros, aunque se estima que podría alcanzar los 15.000.
También hay que mencionar los 20 reales de 1840 (lote nº 416) de Madrid CL, que supera a su compañera en rareza, ya que de esta serie se conocen tan sólo 4 o 5 ejemplares. En estado de conservación excelente, sale a subasta desde 6.000 euros.
Y rarísimos son también estos 2 escudos de Madrid de 1865 (lote nº 446) con los que cerramos nuestro breve repaso a la moneda de plata. En excelente estado de conservación y con brillo original, tienen un precio en catálogo de 4.000 euros.
La oferta de monedas de oro consta de un total de 121 lotes que van desde medios escudos hasta 100 reales e incluye los pesos y sus múltiplos, un amplio surtido en el que destacan ejemplares como los 40 reales de Barcelona de 1864 (lote nº 469), raros y en excelente estado de conservación, a subasta desde 2.500 euros.
O este doblón de 100 reales (lote nº 525) salido de la ceca de Sevilla en 1850, que destaca por su brillo original y su conservación casi sin circular, y por el que se puede pujar a partir de 1.800 euros.
Aunque de nuevo es Madrid la que se lleva la palma en lo que a piezas valiosas se refiere gracias a los 100 reales de 1851 y 1852 (lotes nº 535 y 536). La del primer año es considerada extraordinariamente rara, lo que unido a su excelente estado de conservación dan como resultado que se haya fijado una puja mínima de 4.000 euros. Los 100 reales, o centén, de 1852 (lote nº 536) son también rarísimos y salen a subasta a partir de 3.000 euros.
Recuerden que pueden acceder al catálogo completo pinchando sobre el anunció de Áureo & Calicó junto a estas líneas o pinchando sobre el siguiente enlace: www.aureo.com y que los lotes de su interés se pueden examinar ya desde el pasado día 2 de noviembre.