Entre los días 5 y 9 de octubre la firma alemana celebra una nueva subasta con tres diferentes catálogos en los que la moneda antigua y la alemana tienen un gran protagonismo, pero en los que también se oferta moneda extranjera de diferentes épocas.
La primera semana de octubre, Múnich albergará una de las subastas más destacables de esta temporada de otoño que acabamos de comenzar y que viene con mucha fuerza. La oferta de Gorny & Mosch se divide en tres diferentes catálogos ––moneda antigua de alta calidad, moneda antigua general y lotes de conjunto y, por último, monedas medievales y modernas, junto con alemanas, islámicas y rusas- que se rematarán de lunes 5 a viernes 9 y entre los que no faltan las piezas valiosas. Pero si hay una parte interesante de este remate es el primero de los catálogos, el dedicado a la moneda antigua selecta, y es la que vamos a comentar aquí brevemente.
En este catálogo nº 232 salen a subasta un total de 676 lotes entre emisiones griegas, romanas, romano-provinciales, bizantinas y de los pueblos bárbaros, en los que lo primero que destaca es la variedad, tanto de procedencias como de metales y denominaciones. No faltan clásicos del mundo helénico, como esta tetradracma siracusana (lote nº 70), acuñada en el periodo de la segunda república, entre el 415-405 a. C., por la que se puede pujar a partir de 20.800 euros.
Entre las rarezas de esta subasta se sitúa esta moneda de los edones (lote nº 119), tribu traco-macedónica que acuñó todas sus emisiones monetarias a nombre de su rey Getas, tal y como sucede con esta octodracma. (Para saber más sobre la moneda de los edones: https://panoramanumismatico.com/articulos/la-moneda-de-los-edones/). Su precio de inicio en la puja es de 64.000 euros.
También de gran interés es el surtido de “Wappenmünzen” o monedas heráldicas, que es como se conoce a las primeras emisiones atenienses antes de la incorporación de sus icónicas lechuzas. Esta que vemos (lote nº 178) es una didracma con un precio de salida de 12.000 euros.
De las emisiones helenísticas les traemos esta tetradracma de Seleuco I Nicator (lote nº 293) con la cabeza de Zeus en el anverso y un elefante con punta de lanza y A como marcas de emisión, siendo la tercera pieza conocida hasta el momento con estas marcas. La puja mínima se ha fijado en 16.000 euros.
Pasamos a Roma, donde continúa la diversidad, y como ejemplo. de entre las acuñaciones republicanas les mostramos no un denario, como sería habitual, sino una pieza de oro: uno de los rarísimos ejemplares de 40 ases (lote nº 351) de la emisión de c. 211 a.C. Su precio de inicio en la puja es de 20.000 euros.
Y de áureo a áureo, aunque este de unos cuantos siglos después. Acuñado por Filipo I el Árabe (lote nº 467), esta pieza con la personificación de la Liberalitas con ábaco y cornucopia en el reverso, con un magnífico grabado, sale a subasta desde 25.600 euros.
Aunque sin duda la gran pieza áurea de este remate es este medallón de Valentiniano I (lote nº 524), con un peso equivalente a 9 sólidos, que es considerado un ejemplar único y además inédito. Tanto el engarce como el grado de desgaste indican que era portado como un medallón, y en el catálogo se indica que posiblemente el destinatario de este generoso donativo sería un bárbaro aliado de Roma. La puja mínima por este medallón es de 60.000 euros, pero se calcula que podría alcanzar los 75.000.
Terminamos el mundo antiguo con una pieza de bronce, pero no una cualquiera sino este otro medallón acuñado por Septimio Severo (lote nº 456), que sale a subasta a partir de 28.000 euros. En el reverso vemos una escena de “adlocutio” en la que el emperador, flanqueado por Caracalla y Geta, arenga a las tropas.
Recuerden que además de esta subasta de moneda antigua de alta calidad hay otro catálogo con más moneda antigua y un tercer catálogo con acuñaciones alemanas, extranjeras, rusas o islámicas (por mencionar dos de las grandes secciones que aparecen desgajadas del resto por su importancia), con numerosas piezas únicas o de gran rareza.